El uso de biomasa se ha estado incrementando en los últimos años, en especial porque su coste resulta más bajo. Además, aporta grandes ventajas para el medio ambiente, y puede resultar mucho más barato que cualquier combustible fósil, por lo cual es una energía que es preferida por muchas personas.
En todo caso, desde el punto de vista ambiental aporta la energía con una emisión de carbón neutro, en especial porque se libera únicamente la cantidad de CO2 que tenían las plantas. Esto quiere decir que forma parte del ciclo normal del carbono, lo que hace que sea una energía más pura.
¿Qué hace a la biomasa más barata?
Es importante tener en cuenta que, mediante estudios realizados en la actualidad, la biomasa es una energía que demuestra ser positiva. En especial porque permite la conservación de hongos comestibles y trufas, además de los bosques y la biodiversidad.
Según los estudios, los montes donde se desarrollan las tareas para el aprovechamiento de la biomasa ayudan a proteger las especies amenazadas. Esto hace que se tengan unos mejores resultados, y que se ayuda a que se puedan tener unos grandes resultados.
Por otra parte, los recursos utilizados para la biomasa provienen de madera que procede de explotaciones ecológicamente sostenibles. Por esto la biomasa se encarga de generar puestos de trabajo y empresa en el ámbito global. Así se puede tener una mejor circulación del dinero, y se disminuye la dependencia del país de los combustibles fósiles.
Además, la materia prima que se utiliza para fabricar los pellets de biomasa es bastante económica. Es por este motivo que se pueden tener unos costes mucho más bajos para la producción de biomasa, y esto se traduce en un coste menor de la biomasa como combustible, por lo cual además de aportar al medio ambiente también aporta a la economía.